Veintiocho de agosto
Se acaba el mes de las brujas.
Fin del aquelarre.
Principio de lo personal (salir de cacería a solas)
Me gusta viajar al ras de las montañas o el mar.
A veces es tan tranquilizador.
Tan reflexivo y sugestivo.
No todas el tiempo vivo rodeada de caranchos
También me gustan las lechuzas y los sapos.
Recuerdo haber tenido unos amigos sapos que salían desde abajo de unas cruces negras,
las personas tenían miedo de cruzar cerca del lugar,
yo sentía placer al conversar con ellos...en noches claras de primavera.
Eran ranas magicas o quizas hadas con esa forma.
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