Siete de septiembre
Me veo en el espejo,
que refleja mi rostro
Un rostro ajado
Una mirada esclava,
de un tiempo que fue
Una mirada
Una voz lastimera
Una voz patética,
que susurra
Muerte
¿Adonde me lleva la muerte?
Quizás a ningún lado
Tal vez me quede aquí,
rodeada de maderas olorosas,
inquebrantables
Un refugio
La mirada me asusta,
me abraza al mismo tiempo
Dicen que son la ventana del alma, los ojos.
ResponderEliminarUn beso.
Me temo que la muerte no nos llevará a ningún lado.
ResponderEliminarBesos.