Ocho de septiembre
Hoy fui al cementerio,
el lugar estaba tibio e invitador
No puede aceptar la invitación,
tengo cosas que hacer, les dije
Me quedé un rato
Regué un rosal de una señora,
que estaba allí desde el año pasado
Nada mal, me dijo
Ahora, no se si por la regada,
o por la estancia
Le conté que cuando era pequeña,
mi abuela nos llevaba a jugar al cementerio
Es por eso que me resulta familiar visitar los cementerios
El silencio acompaña para pensar,
Además, regamos las plantas,
cambiamos las flores de las tumbas que tienen mucho,
Para aquellas que nunca tienen flores
Puedes hablar con quien sea, sin que nadie te interrumpa
No es la gran pasión...si la calma
A mi no me gusta ir mucho.
ResponderEliminarBesos.
a veces el silencio invita a entrar y yo entro.
ResponderEliminarbesos
suelo ir a sacar fotos, me atraen esos lugares... tendré que tratarlo con el psicólogo je... saludos...
ResponderEliminarSinceramente soy demasiado emocional y sentimental para pisar esos lugares sin derrumbarme.
ResponderEliminarUn saludo.